Lenacapavir, el medicamento más prometedor contra el VIH, recibe aval de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido por primera vez una recomendación formal sobre el uso de lenacapavir, un nuevo fármaco de acción prolongada desarrollado por la farmacéutica Gilead Sciences para la prevención del virus de inmunodeficiencia humana (VIH). Esta decisión representa un hito clave en la lucha global contra el sida, aunque el alto costo del tratamiento plantea desafíos importantes en cuanto a su accesibilidad.
Un antirretroviral de larga duración que podría cambiar la historia del VIH
Comercializado bajo el nombre de Sunlenca, el lenacapavir ha demostrado ser altamente eficaz en la prevención del VIH, especialmente en personas con mayor riesgo de exposición al virus. Se administra mediante inyecciones subcutáneas cada seis meses, y recientes estudios sugieren que una sola dosis anual podría ser suficiente para evitar el contagio.
En ensayos clínicos de fase 3, el medicamento logró prevenir la transmisión del virus con una efectividad destacada. Según Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, “aunque aún no tenemos una vacuna, el lenacapavir es lo más cercano: un antirretroviral de acción prolongada que ha demostrado prevenir casi todas las infecciones en personas en riesgo”.
La OMS pide facilitar el acceso al medicamento en todo el mundo
La OMS señaló que el lenacapavir puede prevenir la transmisión del VIH con solo dos dosis al año, lo cual representa una ventaja significativa frente a otros métodos de prevención como los comprimidos diarios o los tratamientos de corta duración.
En su comunicado, el organismo también recomendó el uso de pruebas rápidas para detectar el VIH, con el objetivo de facilitar el acceso al tratamiento y simplificar la logística en comunidades vulnerables, como trabajadoras sexuales, personas transgénero, usuarios de drogas inyectables, hombres que tienen sexo con hombres y personas privadas de la libertad.
El alto costo del lenacapavir: una barrera para su implementación global
Actualmente, Sunlenca tiene un precio de 42,250 dólares al año por paciente en Estados Unidos. Este costo ha sido ampliamente criticado por expertos y organizaciones, que señalan que limita seriamente el acceso al tratamiento en países de ingresos bajos y medios.
Un estudio liderado por Andrew Hill, investigador de la Universidad de Liverpool, estimó que el lenacapavir podría producirse y venderse por tan solo 40 dólares por persona al año si se fabricara como genérico y se distribuyera masivamente. El análisis consideró los costos de los ingredientes, la manufactura y un margen razonable de ganancia del 30%.
Se necesitarán millones de dosis para contener el avance del VIH
La OMS calcula que alrededor de 60 millones de personas en el mundo requerirán tratamientos como el lenacapavir para frenar el avance del virus del sida. A pesar de los avances científicos, el acceso a medicamentos sigue siendo desigual, especialmente en regiones donde el VIH tiene mayor impacto.
Durante 2024, se registraron 1.3 millones de nuevas infecciones por VIH y 630,000 muertes relacionadas con el virus. Entre los nuevos casos se encuentran al menos 120,000 niños. Aunque 31.6 millones de personas ya reciben tratamiento antirretroviral, muchos siguen sin acceso adecuado debido a la falta de financiamiento y recursos.
Llamado urgente a gobiernos y donantes para garantizar el acceso al lenacapavir
Ante esta situación, la OMS hizo un llamado urgente a los gobiernos, donantes y socios estratégicos para integrar el lenacapavir en los programas nacionales de prevención del VIH y movilizar recursos que garanticen su disponibilidad a gran escala.
Durante su participación en la XIII Conferencia de la Sociedad Internacional del Sida (IAS) sobre Ciencia del VIH, Tedros Adhanom advirtió sobre las consecuencias de la falta de financiamiento: “La retirada repentina de fondos para los programas contra el VIH está provocando graves interrupciones en el acceso a servicios que salvan vidas en muchos países. Durante más de dos décadas, las inversiones sostenidas han permitido avances revolucionarios. No podemos permitir que ese progreso se pierda”.
El lenacapavir representa una esperanza tangible en la lucha contra el VIH, pero su éxito dependerá de la voluntad política, la cooperación internacional y una estrategia global que garantice su acceso justo y equitativo.