¿Por qué las enfermedades por intoxicación alimentaria aumentan en verano?
El verano es una temporada ideal para disfrutar de comidas al aire libre, parrilladas y reuniones familiares. Sin embargo, también es cuando más se disparan los casos de intoxicación alimentaria. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), aproximadamente 48 millones de personas en Estados Unidos sufren enfermedades transmitidas por alimentos cada año. Y entre julio y septiembre, estas enfermedades son 10 veces más comunes que en invierno.
Altas temperaturas y humedad: el caldo de cultivo perfecto para bacterias
Durante el verano, las condiciones climáticas como el calor y la humedad favorecen la proliferación de bacterias como Salmonella y Listeria. Estas bacterias pueden contaminar los alimentos y provocar síntomas como náuseas, vómito, diarrea y calambres estomacales.
Según Bryan Quoc Le, PhD, consultor en ciencia de alimentos, el calor acelera el crecimiento bacteriano y la humedad adicional presente en verano potencia este efecto. Por ello, es fundamental tener especial cuidado con la preparación, conservación y manipulación de los alimentos durante esta temporada.
Errores comunes al cocinar en verano y cómo evitarlos
Carne mal cocida: un clásico de las parrilladas
Uno de los errores más comunes al cocinar en verano es no cocinar completamente los alimentos, especialmente en las parrilladas. Como explica la Dra. Julie Parsonnet de la Universidad de Stanford, la carne puede verse bien cocida por fuera pero estar cruda por dentro, lo que incrementa el riesgo de infecciones.
¿La solución? Usa un termómetro de cocina para asegurarte de que los alimentos alcancen una temperatura interna segura. La USDA ofrece una tabla con temperaturas recomendadas para distintos tipos de carne y aves.
Mantener los alimentos en la “zona de peligro”
Otro error común es dejar los alimentos a temperatura ambiente por demasiado tiempo. Entre los 4 °C (40 °F) y los 60 °C (140 °F), las bacterias se multiplican rápidamente; esta franja se conoce como la “zona de peligro”.
Janet Buffer, MPH, del Instituto Milken de Salud Pública, advierte que durante reuniones al aire libre es más difícil mantener los alimentos a las temperaturas adecuadas.
¿Qué hacer? Mantén los alimentos fríos en refrigeración o en hieleras hasta el momento de servirlos. Los platos fríos pueden colocarse en bandejas con hielo. Por otro lado, los alimentos calientes deben conservarse sobre la parrilla, en un horno caliente o en bandejas térmicas. Un consejo clave: descarta cualquier alimento que haya estado fuera por más de una hora cuando la temperatura ambiente supera los 32 °C.
Descuidar la higiene al comer y cocinar al aire libre
En verano, la preparación de alimentos muchas veces ocurre en espacios abiertos donde las normas básicas de higiene suelen relajarse. Superficies sin limpiar, utensilios compartidos y falta de lavado de manos son factores que pueden provocar contaminación cruzada.
Según Parsonnet, es común colocar verduras en la misma tabla donde antes se cortó carne cruda. Además, en reuniones con muchas personas, puede faltar acceso a agua corriente para el lavado de manos.
¿Cómo prevenir esto? Lava bien todos los utensilios, tablas de cortar y equipos después de estar en contacto con carne cruda. También lava tus manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos. Si no hay agua disponible, utiliza gel antibacterial o toallitas con al menos 60% de alcohol. Y recuerda: mantén separados los alimentos crudos de los ya listos para comer, incluso en el refrigerador.
¿Qué hacer si presentas síntomas de intoxicación alimentaria?
Incluso si tomas precauciones, no siempre es posible evitar una intoxicación alimentaria. Algunos de los síntomas más comunes son:
- Diarrea
- Cólicos estomacales
- Náuseas
- Vómito
- Fiebre
Estos síntomas pueden durar desde unas horas hasta varios días. La mayoría de los casos son leves, pero ciertos grupos tienen mayor riesgo de complicaciones graves, como:
- Adultos mayores de 65 años
- Niños menores de 5 años
- Personas con sistemas inmunológicos debilitados
- Personas embarazadas
¿Qué hacer si crees tener intoxicación alimentaria? Lo más importante es mantenerse hidratado. Bebe líquidos con electrolitos, como jugo de manzana diluido o caldo claro. Busca atención médica si no puedes retener líquidos, presentas mareos, fiebre alta, no orinas o los síntomas persisten por más de tres días.
Disfruta el verano sin riesgos
El verano es una época perfecta para disfrutar, pero también para ser más cuidadosos con los alimentos. Siguiendo medidas básicas de seguridad alimentaria como cocinar bien los alimentos, mantener las temperaturas adecuadas y practicar buena higiene, puedes reducir considerablemente el riesgo de enfermedades.
Con un poco de atención extra, es posible disfrutar de las reuniones al aire libre sin que la intoxicación alimentaria arruine la fiesta.