La reciente aparición del gusano barrenador en México ha encendido las alarmas, no solo entre ganaderos del sureste, sino también entre quienes consumimos carne. Y es que este parásito, conocido científicamente como Cochliomyia hominivorax, representa riesgos reales tanto para el ganado como para la salud humana.
¿Qué es el gusano barrenador y por qué volvió a México?
Después de más de 30 años de estar ausente, el gusano barrenador reapareció en noviembre pasado. Este insecto pone sus huevos en heridas abiertas del ganado, y al nacer, las larvas se alimentan de tejido vivo, provocando lesiones graves que, si no se tratan a tiempo, pueden incluso causar la muerte.
El secretario de Agricultura, Julio Berdegué, ha iniciado conversaciones con autoridades de Estados Unidos para buscar soluciones conjuntas ante esta problemática.
Casos confirmados en humanos: el brote que preocupa
La Secretaría de Salud ha confirmado seis casos humanos de infestación por larvas del gusano barrenador, afectando a cuatro mujeres y dos hombres en Chiapas y Campeche. Uno de ellos permanece hospitalizado por lesiones complicadas, según datos del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave).
¿Qué pasa si consumes carne con gusano barrenador?
El peligro no es la larva, sino lo que la rodea
El infectólogo pediatra Gerardo López Pérez aclara que comer carne infestada por larvas no es riesgoso si esta fue cocinada adecuadamente. El calor elimina al parásito. Pero ojo, lo que sí puede provocarte molestias es la presencia de bacterias generadas por la descomposición del tejido.
“La larva en sí no representa riesgo cuando la carne está cocinada; lo que sí podría generar molestias son bacterias presentes en el tejido descompuesto, causando síntomas gastrointestinales como diarrea o vómito”, explicó el especialista.
¿Cómo detectar carne contaminada?
El especialista recomienda estar alerta a signos como:
-
Olores desagradables o fuera de lo común
-
Decoloración o manchas sospechosas
-
Textura inusual o partes visiblemente deterioradas
Además, evita comprar carne en tianguis o establecimientos sin certificación sanitaria y siempre cocina bien los productos de origen animal.
Personas con mayor riesgo
El riesgo más fuerte lo enfrentan quienes tienen las defensas bajas:
-
Adultos mayores
-
Personas con diabetes
-
Pacientes con mala circulación
-
Personas con heridas abiertas
En estos casos, una picadura de la mosca barrenadora puede provocar miasis, una infección seria donde las larvas crecen en la piel o tejidos blandos.
“Hemos observado casos severos en personas vulnerables, especialmente diabéticos, donde la larva prolifera debido a su mala circulación. Es una situación dolorosa que puede llevar a amputaciones si no se atiende oportunamente”, alertó el doctor López Pérez.
El impacto en la ganadería y la cadena de abasto
Pérdidas económicas y protocolos estrictos para los ganaderos
Héctor de Hoyos Koloffon, presidente de la Asociación de Engordadores de Ganado Bovino del Noreste (AEGBN), explicó que la presencia del gusano barrenador afecta a toda la cadena, desde la crianza hasta el consumo. Incluso, mencionó que el sector exportador está detenido.
Para prevenir más contagios, ahora se exigen ocho requisitos estrictos antes de recibir cualquier ganado en los corrales de engorda:
-
Certificado de movilización
-
Trazabilidad del ganado
-
Factura de compra
-
Arete e identificación de origen
-
Destino nacional de consumo
-
Constancia de tratamiento contra gusano barrenador
-
Pruebas negativas de tuberculosis
-
Doble aplicación de ivermectina y fleje en jaulas
Todo este protocolo está validado por Senasica (Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria).
¿Qué medidas se están tomando?
La opción ideal, según expertos, es el control biológico mediante la liberación de moscas estériles, técnica usada con éxito en el pasado. Sin embargo, actualmente México no cuenta con una fábrica activa para producirlas.
Las zonas con mayor afectación hasta el momento incluyen: Chiapas, Campeche, Veracruz, Tabasco, Oaxaca, Yucatán y Quintana Roo.
Conclusión: ¿debes preocuparte?
Mientras se sigan los protocolos adecuados, no hay razón para alarmarse de más. Lo importante es:
-
Comprar carne en lugares certificados
-
Revisar la apariencia y el olor antes de cocinar
-
Cocinar completamente los alimentos
-
Consultar al médico si hay síntomas de infección o intoxicación
La prevención empieza en casa, y estar informados es la mejor defensa ante este tipo de riesgos sanitarios.
