Cómo el cerebro se limpia mientras dormimos: el sistema glinfático y su impacto en la salud

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22 febrero, 2025
| Salud mental
Salud FM
Foto: Gaceta UNAM
Durante el sueño, el cerebro realiza un proceso de limpieza vital mediante el sistema glinfático, eliminando toxinas asociadas a trastornos neurodegenerativos. Los fármacos pueden alterar este mecanismo

El cerebro, ese órgano tan complejo, no solo se encarga de procesar información y coordinar las funciones del cuerpo, sino que también se ocupa de su propia limpieza durante el sueño. Este proceso es clave para evitar la acumulación de toxinas asociadas con trastornos neurodegenerativos graves, como el Alzheimer. El sistema glinfático, descubierto hace más de una década, es el mecanismo que permite al cerebro gestionar sus residuos mientras descansamos. Sin embargo, medicamentos como los somníferos pueden alterar este proceso natural.

¿Cómo funciona el sistema glinfático del cerebro durante el sueño?

Cuando dormimos, nuestro cerebro no solo se encuentra en reposo, sino que también realiza una tarea fundamental: limpiarse. Durante las primeras horas de sueño, el cuerpo comienza a relajarse y los procesos de reparación física entran en acción. Al llegar a la fase más profunda del sueño, el cerebro inicia su limpieza interna. Cada 50 segundos, un neuromodulador llamado noradrenalina se libera en los vasos sanguíneos del cerebro, causando que se dilaten y contraigan. Esto permite que el líquido cefalorraquídeo fluya libremente a través del cerebro, llevando consigo los residuos acumulados durante el día.

Este proceso es posible gracias al sistema glinfático, que, de manera similar al sistema linfático, elimina las toxinas que se generan cuando las células cerebrales realizan sus funciones. La acumulación de ciertos residuos, como la beta amiloide, una proteína asociada con el Alzheimer, puede ser tóxica si no se elimina adecuadamente.

El papel de la noradrenalina en la limpieza cerebral

En un reciente estudio publicado en la revista Cell, los investigadores han identificado el papel crucial de la noradrenalina en este proceso de “lavado cerebral”. La noradrenalina permite la circulación del líquido cerebroespinal durante el sueño, facilitando la eliminación de desechos. Según Natalie Hauglund, neurocientífica de la Universidad de Oxford y autora del estudio, cuando las células cerebrales trabajan, producen materiales no utilizados que se liberan fuera de ellas. Si no se eliminan, estos materiales pueden acumularse y generar problemas graves, como las placas amiloides en pacientes con Alzheimer.

Sin embargo, aún queda un misterio por resolver: ¿por qué este proceso de limpieza solo ocurre durante el sueño? Los científicos sugieren que el día está lleno de procesos cognitivos que no pueden ser interrumpidos por la limpieza, lo que haría imposible que ocurra mientras estamos despiertos.

El sueño farmacológico y su impacto en el sistema glinfático

Aunque el sueño es esencial para la limpieza cerebral, no todos los tipos de sueño permiten que el sistema glinfático funcione adecuadamente. Un dato preocupante es que algunos fármacos para dormir, como los que contienen zolpidem, pueden alterar el proceso de limpieza. Estos medicamentos afectan la arquitectura del sueño, inhibiendo la liberación de noradrenalina, lo que reduce la eficacia del sistema glinfático. En experimentos con ratones, se observó que los animales que tomaron zolpidem tenían un 50% menos de liberación de noradrenalina durante el sueño profundo, lo que redujo la eficacia del transporte de líquidos y desechos en el cerebro en más del 30%.

Consejos sobre el uso de medicamentos para dormir

El uso de medicamentos para dormir debe ser cauteloso. En España, el consumo de estos fármacos es alarmantemente alto, siendo el primer país del mundo en su consumo. Carlos Egea, presidente de la Federación Española de Sociedades de Medicina del Sueño, destacó que cinco millones de personas en España dependen de ellos para poder dormir. Sin embargo, Gerard Mayà, neurólogo en el Hospital Clínic de Barcelona, advierte que los hipnóticos no deben ser la primera opción para tratar el insomnio. Aunque son efectivos a corto plazo, pueden producir efectos adversos y tolerancia, lo que hace recomendable buscar alternativas más saludables.

El estudio de Hauglund también señala que ahora que sabemos cómo funciona el sistema glinfático, será posible investigar formas de mejorar el sueño sin interferir con los procesos de limpieza cerebral. La clave será encontrar una manera de promover un sueño profundo y reparador, sin los efectos negativos de ciertos medicamentos.

Un círculo vicioso: trastornos del sueño y acumulación de toxinas

Los trastornos del sueño, como el insomnio, no solo afectan nuestra calidad de descanso, sino que también impiden que el cerebro se limpie adecuadamente. Cuando no se alcanza la fase profunda del sueño, el sistema glinfático no se activa y, como resultado, el cerebro no puede eliminar las toxinas acumuladas. Esta acumulación, a su vez, interfiere con el descanso, creando un círculo vicioso que puede afectar nuestra salud cerebral a largo plazo.

La importancia de un sueño saludable para la salud cerebral

El sueño no solo es esencial para nuestra salud física y emocional, sino también para la limpieza cerebral. La acumulación de toxinas en el cerebro, si no se elimina adecuadamente, puede estar relacionada con enfermedades neurodegenerativas graves. Por lo tanto, es fundamental priorizar un sueño natural y evitar el uso excesivo de medicamentos para dormir, que podrían alterar este proceso crucial para la salud cerebral.

Con los avances científicos en el estudio del sistema glinfático, el futuro podría ofrecernos nuevas soluciones para mejorar el sueño y, al mismo tiempo, proteger nuestra salud cerebral.

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