Científicos simulan los beneficios de la siesta sin necesidad de dormir

|
27 enero, 2025
| Estilo de vida
Salud FM
Foto: Pexels
Investigadores logran replicar los efectos restauradores del sueño mediante estimulación cerebral, lo que abre nuevas puertas para tratar trastornos del sueño y mejorar el rendimiento cognitivo

En un innovador experimento, un equipo de científicos ha logrado simular algunos de los beneficios del sueño a través de estimulación cerebral, sin que sea necesario dormir. Este hallazgo no solo podría revolucionar el tratamiento del insomnio, sino que abre la puerta a una posible terapia para corregir los daños del sueño. ¿Llegaremos a tener un dispositivo que nos permita disfrutar de los beneficios del descanso sin dormir? Aquí te contamos todos los detalles.

¿Por qué necesitamos dormir?

Dormir es una de las necesidades primarias del ser humano, como lo es comer o beber. Sin embargo, su función exacta sigue siendo un misterio. Todos hemos experimentado los efectos de una mala noche de descanso, y sabemos que cuando no dormimos lo suficiente, nuestra capacidad para funcionar se ve afectada. A pesar de ser una necesidad básica, el sueño, y especialmente el papel del cerebro durante este proceso, sigue siendo uno de los mayores desafíos de la ciencia.

El sueño y sus efectos cerebrales

Aunque se sabe que el descanso físico es importante, la verdadera magia del sueño ocurre en el cerebro. Durante el sueño, el cerebro no se apaga, sino que realiza procesos vitales para el mantenimiento del cuerpo, como la consolidación de la memoria y la reparación de las neuronas. De hecho, investigaciones previas, como las del Centro Médico de la Universidad de Rochester, demostraron que el sueño permite la eliminación de residuos tóxicos del cerebro, lo cual podría ayudar a prevenir enfermedades neurodegenerativas como el Alzhéimer.

Avances en la simulación del sueño

Recientemente, un grupo de investigadores de la Universidad Rice, la Facultad de Medicina Weill Cornell y el Instituto Metodista de Investigación de Houston han logrado simular un beneficio clave del sueño: la mejora del rendimiento cognitivo. Su investigación, publicada en la revista Science, se centró en el sueño NREM (sin movimientos oculares rápidos), que es el tipo de sueño que experimentamos durante una siesta corta.

¿Cómo simularon los efectos del sueño?

Los científicos realizaron un experimento con macacos para estudiar cómo el sueño NREM influye en la actividad cerebral y el rendimiento cognitivo. Durante una siesta de 30 minutos, los investigadores observaron un aumento en las ondas cerebrales delta de baja frecuencia, lo que se traduce en una mayor sincronización de las neuronas en el cerebro. Esta sincronización permite que, al despertar, el cerebro esté más despejado y con una capacidad de procesamiento de información superior, lo que se refleja en un mejor desempeño en tareas visuales.

Estimulación cerebral para simular los efectos del sueño

A continuación, los investigadores aplicaron estimulación cerebral artificial mediante electrodos mientras los macacos estaban despiertos. Esta estimulación replicó las ondas cerebrales delta que ocurren durante el sueño NREM, y los resultados fueron sorprendentes: los monos mostraron un aumento en su rendimiento cognitivo similar al observado después de una siesta real. Este hallazgo es clave porque sugiere que algunos de los beneficios del sueño podrían ser inducidos sin necesidad de dormir.

Posibles aplicaciones para tratar el insomnio y mejorar el rendimiento cognitivo

Este avance podría tener importantes aplicaciones en el tratamiento de trastornos del sueño como el insomnio, al permitir la estimulación cerebral para mejorar la memoria y el rendimiento cognitivo sin necesidad de que el paciente duerma. El director del estudio, Valentin Dragoi, subraya que los resultados abren la posibilidad de crear tecnologías que imiten los efectos del sueño en personas sanas, beneficiando incluso a aquellos que, por diversas razones, no pueden disfrutar de un descanso reparador.

Desafíos y futuras investigaciones

Aunque los resultados obtenidos en animales son prometedores, aún queda mucho trabajo por hacer antes de que estos avances sean aplicables en humanos. Para lograr replicar los beneficios del sueño de manera efectiva, los científicos deberán encontrar formas de aplicar esta estimulación cerebral de forma no invasiva. La estimulación con electrodos en el cerebro de los macacos fue superficial, pero el siguiente paso será diseñar dispositivos que puedan estimular el cerebro sin necesidad de implantes.

Además, el estudio se centró en el sueño NREM, pero para que la simulación del sueño sea completa, también será necesario estudiar cómo replicar los efectos del sueño REM, la fase en la que soñamos y que se cree tiene funciones reparadoras fundamentales para la salud mental.

El futuro del sueño sin dormir

Aunque hoy en día la idea de “dormir sin dormir” sigue siendo un sueño lejano, los investigadores son optimistas. El paso de la estimulación invasiva a la estimulación eléctrica no invasiva es una de las grandes apuestas para el futuro. Dragoi y su equipo planean seguir avanzando en sus estudios y explorar formas de emular todo el ciclo del sueño.

1