El tiempo a solas es algo esencial para la salud mental de muchas personas, pero no todo tipo de soledad es igualmente restaurador. Un nuevo estudio encontró que las actividades en solitario, cuando se combinan con medios de comunicación o interacción social, podrían ser más reparadoras que el aislamiento total.
A continuación, te contamos lo que dice la ciencia sobre cómo aprovechar el tiempo a solas para recargar energías y mejorar tu bienestar.
El estudio sobre la soledad y el bienestar emocional
Según una encuesta reciente, el 56% de las personas en los Estados Unidos consideran que el tiempo a solas es crucial para su salud mental. Sin embargo, un nuevo estudio publicado en la revista PLOS One en diciembre de 2023 señala que no toda forma de soledad tiene el mismo impacto en la restauración emocional.
Morgan Ross, PhD, autor principal del estudio y profesor asistente en la Escuela de Comunicación de la Universidad Estatal de Oregón, explica que en la era moderna, la soledad ya no se trata solo de estar físicamente solo. Hoy en día, es importante diferenciar entre soledad física y soledad social, especialmente porque estamos más conectados que nunca a través de tecnología.
Resultados clave del estudio sobre las distintas formas de soledad
En el estudio, se encuestó a aproximadamente 900 personas, cuyo promedio de edad fue de 62 años. Los participantes calificaron diversas formas de soledad según su acceso a la tecnología y la interacción social. Las categorías evaluadas fueron las siguientes:
Soledad base: tiempo solo con acceso a medios (teléfono, libro o música)
Las personas que estuvieron solas pero con acceso a algún tipo de medio, como escuchar un podcast o leer un libro, reportaron que esta fue la forma más restauradora de soledad. Se sintieron más conectados y menos aislados, lo que contribuyó a un mayor bienestar emocional.
Soledad base con inaccesibilidad: tiempo solo sin interacción social pero con acceso a medios
En esta modalidad, las personas permanecieron solas y fuera del alcance de otros, pero continuaron teniendo acceso a medios. Por ejemplo, caminar en el bosque mientras se escucha música o un podcast. Aunque esta forma de soledad también fue favorable, las personas notaron un poco más de desconexión social.
Soledad base sin medios: tiempo solo sin acceso a medios ni interacción social
Aquí, los participantes estaban solos en lugares públicos como cafeterías o el transporte público, pero no interactuaban con nadie ni usaban medios como el teléfono. Esta modalidad generó un sentimiento de mayor desconexión que las anteriores, aunque algunas personas aún la consideraron beneficiosa.
Soledad total: tiempo sin acceso a medios ni interacción social
El estudio encontró que la soledad total, como hacer una caminata en el bosque sin celular o ir de campamento sin cobertura de red, no fue tan restauradora como se esperaba. Las personas que eligieron esta opción reportaron sentirse más aisladas y menos rejuvenecidas emocionalmente.
¿Por qué la soledad base es más restauradora?
Los hallazgos del estudio sugieren que tener acceso a algún tipo de medio familiar (como un teléfono, música o un libro) mientras se está físicamente solo es más restaurador que estar completamente desconectado. La interacción social, aunque sea indirecta o mediada por tecnología, puede disminuir la sensación de aislamiento y mejorar el bienestar emocional.
Sophia Spencer, MSc, psicóloga social y psicoterapeuta de Londres, explicó que la sensación de estar conectado, aunque sea de manera virtual, ayuda a las personas a sentirse menos solas. Este tipo de soledad tiene beneficios, ya que permite a las personas sentirse más acompañadas, incluso si no están en contacto directo con otras personas.
El impacto de la actitud hacia la soledad
Lo más importante que se observó en el estudio fue que las personas que tenían una actitud positiva hacia la soledad, independientemente de la forma en que la vivieran, experimentaban mayores beneficios emocionales. “Las personas que ven la soledad como algo positivo experimentan un mayor bienestar mientras más tiempo lo practican”, comentó Ross.
Además, la cantidad de interacción social diaria no parece influir significativamente en cómo las personas perciben la soledad. Aquellos con trabajos muy sociales no necesariamente perciben la soledad como más restauradora que aquellos con trabajos menos interactivos.
Consideraciones sobre la soledad y el bienestar
Aunque este estudio aporta nuevos conocimientos sobre cómo distintas formas de soledad pueden afectar nuestro bienestar, también tiene limitaciones. Por ejemplo, la mayoría de los participantes tenían una edad promedio de 62 años, por lo que las conclusiones pueden no ser aplicables a personas más jóvenes. Spencer señaló que la forma en que los adultos jóvenes utilizan la tecnología podría influir en los resultados, ya que muchos pueden preferir la desconexión total.
¿Cómo encontrar el tipo de soledad que te recarga?
El tipo de soledad que mejor te recarga dependerá de tus necesidades individuales y tu personalidad. Como señala Ross, la soledad tiene un componente de “elige tu propia aventura”, lo que significa que cada persona puede encontrar diferentes tipos de soledad que se adapten mejor a su bienestar.
¿Eres más extrovertido o introvertido? ¿Tienes una vida muy social o prefieres la calma de la soledad? Escucha a tu cuerpo y tu mente: si una actividad te está recargando, sigue por ese camino. Si notas que te sientes más fatigado o desconectado, es posible que debas ajustar la forma en que pasas el tiempo a solas.
La importancia de la autoconciencia para que la soledad sea restauradora
Para que la soledad sea realmente restauradora, es esencial tener autoconciencia. Día tras día, pregúntate: ¿Esta actividad me está recargando o no? Si no estás seguro, podría ser útil explorar distintas formas de soledad hasta encontrar la que mejor te funcione.
Recuerda, el objetivo no es simplemente estar solo, sino hacerlo de manera que tu bienestar emocional y mental se vea fortalecido.
